El proyecto de defensa antimisiles Golden Dome del presidente Donald Trump requerirá un esfuerzo de todo el gobierno, similar al Proyecto Manhattan para desarrollar la bomba atómica, según un general de la Fuerza Espacial.
“Esto es del orden de magnitud del Proyecto Manhattan, y va a requerir un esfuerzo concertado desde lo más alto de nuestro gobierno. Va a requerir una voluntad nacional para unir todo esto”, dijo el general Michael Guetlein, subdirector de operaciones espaciales de la Fuerza Espacial de Estados Unidos, en una reunión de expertos de la industria de defensa el miércoles.
La idea de Golden Dome surgió de Iron Dome de Israel. Con la ayuda de Estados Unidos, emplea un límite invisible que activa interceptores cuando se disparan misiles de corto alcance hacia su territorio.
Pero Golden Dome ha demostrado ser un proyecto más desalentador para proteger a Estados Unidos, que es cerca de 500 veces el tamaño de Israel y probablemente se vería amenazado más por misiles de largo alcance que por misiles de corto alcance.
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Guetlein dijo que el proyecto requerirá una cooperación sin precedentes entre las agencias de defensa e inteligencia.
“Estamos en pleno modo de planificación”, dijo el funcionario en la Cumbre de la Base de Innovación en Seguridad Nacional organizada por el Instituto Ronald Reagan. “Debemos dar una respuesta a la Casa Blanca antes de fin de mes sobre nuestras ideas”.
El Golden Dome tendría que proteger a Estados Unidos de una variedad de amenazas, incluidos misiles hipersónicos, misiles balísticos y misiles de crucero avanzados. La detección temprana dependería de sensores espaciales que activarían interceptores de misiles de respuesta rápida.
“Va a ser una tarea difícil para todas las organizaciones que van a participar. Y lo que realmente tenemos que superar son los límites organizacionales y las culturas que van a tratar de frenarnos o impedir que trabajemos juntos”, dijo Guetlein.
Según Guetlein, la Agencia de Defensa de Misiles de Estados Unidos es “realmente buena en la protección de la patria contra un ICBM”, pero necesita que la Fuerza Espacial construya capacidades espaciales, y que la Fuerza Aérea y el Ejército gestionen sistemas antidrones.
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La Oficina Nacional de Reconocimiento, que opera los satélites espías de Estados Unidos, también tiene capacidades espaciales necesarias para la protección de la patria.
Guetlein dijo que la nación tendría que “derribar las barreras” entre el Título 10 y el Título 50 del Código de los Estados Unidos, las leyes federales que rigen la defensa y las operaciones clandestinas de la nación.